domingo, 8 de abril de 2012

Mi pesadilla. Capítulo 15.

- Louis, ¿dónde está? -repetí.
Lo único que obtuve por su parte fue una mirada preocupada.
 - Ven, vamos a dar un paseo. Los dos tenemos que tomar el aire.
Realmente, él estaba más perjudicado que yo, pero acepté y comenzamos a caminar por la oscuridad de las calles.
 - ¿Me vas a decir donde está?
 - ¿Estás segura de que quieres saberlo?
 - Sí, ¿por qué no?
 - Está en Italia.
Mi cara en ese momento, debía ser una mezcla entre confusión, sorpresa...¿En Italia? ¿Qué hacía en Italia?
 - ¿Te ha hablado de Eli?
En ese momento caí, su novia era italiana... Me sentía bastante estúpida, había llegado a pensar que Harry se había puesto mal por la llamada de Tom, pero era imposible, él podía tener a cualquier chica y yo no era especial, ya me lo había demostrado varias veces.
 - Sí, su novia.
 - Ha ido a verla, dice que necesitaba pasar tiempo con ella y...
 - ¿Nos vamos a casa? Por favor.
 - Sí, claro. Vamos.
Los dos caminamos en silencio hasta casa, Louis no quería coger el coche, era normal y tampoco estábamos muy lejos.
 - Voy a dormir. Buenas noches, Lou. -dije nada más entrar.
 - Eh, espera.
Noté como me agarraba de la mano y hacía que me detuviera.
 - ¿Estás bien? Digo, desde que te dije que Harry estaba en Italia...
 - Sí, no tiene por qué molestarme.
Sonreí forzadamente, le di un beso en la mejilla y entré en mi habitación.
Claro que me importaba, había conseguido olvidarme de él, pero al volver a Londres y verlo todos los días, era imposible sacarlo de mi cabeza, estaba presente en todos y cada uno de mis pensamientos, y lo único que él hacía era confundirme. No entendía nada, no entendía por qué intentaba acercarse a mí, no entendía porque me miraba como lo hacía...
 - Gabs, ¿puedo pasar?
 - Sí, pasa.
La puerta se abrió y Louis entró.
 - ¿Te puedo dar un consejo?
 - Sí, claro. Dime.
 - Llama a Tom, es lo mejor.
Me sonrió, le devolví la sonrisa y salió de nuevo.
Tenía razón, debía llamar a Tom y pedirle perdón, algo me decía que él era el único que podía ayudarme a sacar a Harry de mi cabeza. Pero decidí llamarlo por la mañana, ahora era tarde y no quería despertarlo después de haberlo dejado plantado.
Aquella noche, me costó poco dormirme, pero sería mejor que no lo hubiera hecho, no dejaba de tener pesadillas, pesadillas sin ningún tipo de sentido, pero pesadillas al fin y al cabo.
  - Buenos días, ¿te encuentras bien? Tienes mala cara. -me dijo Louis nada más entrar en la cocina.
 -  No he tenido una buena noche...¿Qué vas a hacer hoy?
 - Iré a casa de Zayn, supongo, no tengo nada que hacer... ¿y tú?
 - Tengo que ir a la universidad a arreglar unos papeles y después veré a Sam.
 - ¿Cuando empiezas?
 - En un par de semanas.
 - Oye, ¿por qué no le dices a Sam si quiere venir a cenar? O a comer, lo que prefiera.
Lo miré interrogante, no entendía a que venía aquello así de repente.
 - Lo digo porque, no sé, no está Harry y...
 - ¿Te gusta Sam?
 - No, o sea, parece simpática...
Me reí, recogí mi taza y me dispuse a salir de la cocina, pero antes de salir me giré y le dije:
 - No tiene novio, le pareces muy guapo y tranquilo, esta noche vendrá a cenar.
Le guiñé un ojo, él me dedicó una sonrisa vergonzosa y yo me fui a mi habitación para llamar a Sam.
 - ¿Sam? ¿Te apetece venir a cenar hoy? O a comer, como quieras.
 - ¿Hola? ¿A qué viene esto?
 - No sé, es por si te apetecía... Además, Louis me ha hablado de ti.
 - ¿Qué te ha dicho?
 - Aaaah..., si quieres saberlo tienes que venir. ¡Adiós!
Colgué dejándola con la intriga y me dispuse a recoger mi habitación. Cuando acabé de recoger todo, cogí un libro y me tiré en la cama a leer, pero no podía dejar de pensar en el hecho de Harry estaba en Italia... Había ido hasta allí solo para ver a su novia y...
 - Gabs, un tal Tom pregunta por ti en la puerta. ¿Qué hago? -Louis me había sacado de mis pensamientos.
 - ¿Tom? Espera, ahora salgo.
 - ¿Le digo que pase?
 - Como quieras.
Me cambié de ropa corriendo, fui al baño, me arreglé un poco el pelo y salí a verlo.
 - ¿Tom? ¿Qué haces aquí?
 - Hola, venía a preguntarte si te apetecía salir a comer conmigo.
 - Sí, claro... Espera, voy a avisar a Louis. Ahora vengo.
Louis se había ido a su habitación para dejarnos solos y allí fui a avisarlo.
 - Lou, ¿te importa si voy a comer con Tom?
 - No, me iba a ir ahora con Niall a comprar unas cosas. Comeré con él.
 - Vale, pues nos vemos a la noche.
Tom y yo, paseamos hasta la hora de comer por todo Londres, era un chico muy simpático y muy guapo, era divertido y lo mejor de todo, no sabía nada de mí, simplemente se acercaba a mí porque me quería conocerme.
 - ¿Donde te apetece comer? -me preguntó.
 - Me da igual, me apetece pizza.
 - No es por presumir, pero hago la mejor pizza de todo Londres.
 - ¿Me estás invitando a comer pizza en tu casa?
 - Solo si no tienes miedo de ir a mi casa, conmigo a solas y confías en que no te quiera envenenar...
 - Suena tentador...
 - ¿Eso es un sí?
 - Eso es un: ¿Dónde vives?

2 comentarios:

  1. Me encanta! Louis y Sam son bastante graciosos :)
    Tom me cae mal…no se por que…pero me cae mal…ojalá me equivoque y sea un buen chico.

    ResponderEliminar
  2. MENCANTAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA*_________*
    Louis y Sam son tan monos! Acabaran juntos no?$:
    Que coño hace Harry en Italia, que corte con su novia i salga con Gabriela!$$: El siguiente por favor!<3

    ResponderEliminar