miércoles, 26 de octubre de 2011

"Todo cambia" Capítulo 11.

Al ver como la miraba, Brenda no pudo evitar separarse de Ryan.
- Yo...lo siento...
Salió corriendo al baño y cuando salió, el local estaba prácticamente vacío.
Buscó a Ryan con la mirada pero, no lo vio por ningún lado, así que, decidió salir. De camino a la puerta, se cruzó con varios concursantes del X Factor, en ese momento, comprendió por qué Louis estaba allí.
Salió del local y vió a Ryan apoyado en una baradilla, se estaba acercando a él pero, una mano la agarró, era Harry.
- ¿Y tú aquí?
- He venido con él -dijo señalando a Ryan- su padre es el dueño de esto.
- Vaya, que bien te rodeas. -contestó él con un tono un tanto molesto.
- He de irme, me está esperando.
Brenda se acercó a Harry y le dio dos besos pero, Louis apareció.
- ¿Que haces aquí? ¿Quién es él? ¿El por él por el que llorabas? -preguntó Louis.
- No, no lloraba por él -contestó ella- es solo un amigo.
- Vaya...tienes una manera un tanto peculiar de tratar a tus amigos...
Harry los miraba perplejos, mantenían un tono de conversación que cualquiera que los escuchara, pensaría que se odiaban.
- Brenda, ¿quieres que te lleve a casa? -ese fue Ryan.
Cuando Brenda escuchó su nombre comenzó a palidecer y Louis, Louis también, la miraba y ella, podía ver en sus ojos como si la pantalla de cristal que lo cegaba y no le dejaba verla, se hubiera roto.
- Brenda...-susurró él.
- Sí, Brenda, no entiendo como no te has dado cuenta antes, no lo entiendo Louis.
Louis parecía perdido, su mirada estaba perdida, no podía pensar con claridad, todos sus pensamientos se habían nublado.
- Sí, por favor, llévame a casa.
Brenda, se fue con Ryan.
- ¿Quie era ese chico? -preguntó Ryan.
- Alguien a quien no debería haber vuelto a ver.
- Si necesitas hablar puedo escucharte...
- No hace falta, Ryan, por cierto...siento haber ido así antes.
- No pasa nada...me precipité...
Ella no le dejó acabar de hablar, se acercó y lo besó.
- Gracias por traerme, no te olvides de llamarme.
- No lo haré, te juro que no lo haré.
Los dos no dejaban de sonreír, ella bajó del coche y entró en casa.
- Cariño, ¿que tal te ha ido la noche? -preguntó su madre al verla.
- Muy bien, Louis ya sabe quien soy.
- ¿Qué?
- Mañana hablamos, voy a dormir que estoy cansada, ¡buenas noches!
Subió a su habitación, se cambió y cuando estaba a punto de meterse en su cama a dormir, entró Eric.
- Bren, es Louis, dice si puede hablar contigo un momento.
- Sí, claro, ¿puedes dejarme sola?
Eric le entregó el teléfono y salió.
- ¿Que quieres? -contestó bruscamente.
- ¿Por qué no me has dicho que eras tú? ¿Por qué no me lo has dicho?
- Porque quiero que salgas de mi vida, como yo salí de la tuya.
- Nunca has salido de mi vida...
- Louis, el otro día, me llamó tú novia. ¿Sabes que me dijo?
- ¿Hannah?
- Sí, Hannah. Me dijo que nunca le habías hablado de mi pero que, tus amigos, le dijeron que yo estaba muy unida a ti.
- Yo..., lo siento...
- No lo sientas, no tienes nada que sentir, solo respeta mi decisión. Buenas noches, Louis.

3 comentarios:

  1. MAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAS! NECESITO OTRO!!(LL)

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  2. SI, DEFINITIVAMENTE TE AMO DREI *-*
    ADOROO TUS HISTORIAS :)
    Escribes geeeeenial, me encanta (L).

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