Capítulo 19.

- Seguro que cuando llegues a California conoces a miles de chicas más guapas que yo, más listas, más simpáticas...
- ¿Sabes? Todas las chicas de California tienen un defecto...¿quieres saber cual?
- ¿Cual?
- Ninguna de ella eres tú.
- Jo, Hazza, te quiero.
- Y yo a ti, tonta, mucho y te voy a echar de menos...
- Duerme conmigo esta noche va, como despedida, porfi
- Cuando se acuesten todos, iré a tu habitación.
Seguimos hablando hasta que se hizo de noche y entramos en casa, por separado claro, para que nadie pensara que estabamos juntos. Cenamos y subí a mi habitación.
Llamaron a la puerta, sabía que no era Harry porque era muy temprano.
- ¿Sí?
Era mi hermano se venía a despedir de mi porque no me quería despertar por la mañana ya que se iban muy pronto.
- Looooooooooooooooooooou
- Ven aquí cariño.
Me dio un abrazo y un collar, un collar que nuestra madre le había regalado y traía buena suerte.
- Te voy a echar de menos enana, hace mucho que no nos separamos tanto tiempo.
- Desde que entraste en Factor X...
- Y ese tiempo allí se me hizo eterno, perfecto pero, eterno.
- Bueno, es menos tiempo el que vas a estar en California y me vas a llamar todos los días si no te odiaré toda la vida...
- Claro que te voy a llamar todos los días, así que estate atenta al skype.
- Awwwwwwwwwwwwwwwww te quiero.
- Y yo a ti.
Estuvimos un rato juntos y se fue, lo iba a echar de menos, mucho bueno, a él y a todos, en menos de 1 mes se habían hecho super importantes para mi y los adoraba con toda mi alma.
Después me puse a mirar ropa para ponerme el día siguiente para ir al instituto y cuando me estaba mirando al espejo, llamaron a la puerta. Era él, son su sonrisa perfecta.
- Mira -me dijo
- ¿Lo que?
- Delante tuya, el amor de mi vida.
- Es un espejo...
- Lo sé.
- ¿Sabes? Yo también conozco al amor de mi vida.
- ¿Ah sí? ¿Lo conozco?
- No creo...es un chico alto, muy guapo, con el pelo rizo, una sonrisa perfecta, los ojos más bonitos del mundo...¡ah sí! y tiene a millones mujeres detrás suya amándolo...
- Mmmm...me suena...
- Se llama Liam.
- ¿Como?
- Eres tonto. -le dije riéndome.
- Y tú, pero te quiero.
- Yo a ti más.
- Mmmm...permíteme dudarlo...
- No te permito nada...
Se acercó y empezamos a besarnos él tropezó y caímos sobre la cama, él encima mío. Nos miramos y empezamos a reírnos.